Existe un mundo en que sus habitantes innovan a velocidades de
vértigo (por poner un ejemplo pongo uno de los mios, pero vale cualquier
tema). Las ideas no sĂ³lo no pueden ser mantenidas en secreto sino que
se han de publicar con todo lujo de detalles si se quiere sobrevivir. Se
han de publicar rĂ¡pido, antes que los demĂ¡s. Con la Ăºnica ventaja de la
experiencia previa, muy pocas veces con la ventaja de la posiciĂ³n. Y si
existe posiciĂ³n es por el trabajo acumulado y la experiencia. El haber
conseguido algo en un campo especĂfico no asegura el Ă©xito futuro a no
ser que se mantenga el ritmo innovador. Y la remuneraciĂ³n depende no de
la renta, no de la posiciĂ³n. No de un privilegio legal. Depende de la
reputaciĂ³n. Ese mundo, como habrĂ©is adivinado es la propia ciencia." Un
esclarecedor artĂculo que vislumbra un mundo mejor.
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